Desde el 26 de septiembre de 2015, la Directiva Europea de Ecodiseño exige que los aparatos de calefacción cumplan unos requisitos en materia de eficiencia energética. A partir de esa fecha, las calderas que no cumplan los criterios exigidos por la normativa (es decir, una eficiencia energética estacional -ETAS- superior o igual al 90%) ya no podrán comercializarse.
Los particulares que deseen instalar una nueva caldera deberán instalar un modelo de alto rendimiento energético (condensación). De hecho, es uno de los únicos productos que cumple con los requisitos de eficiencia.
Sin embargo, hay algunas excepciones. La instalación de una caldera HPE no es posible en todas las configuraciones porque requiere un conducto sellado. Por lo tanto, las viviendas equipadas con chimenea colectiva aún pueden instalar una caldera de derivación de humos clásica o especial. Para viviendas equipadas con VMC, será necesario instalar una caldera de baja temperatura. Te explicamos la diferencia entre estos 3 modelos.
La clásica caldera de gas
Las calderas de gas convencionales (también llamadas estándar) funcionan a alta temperatura (60-80°). Estas son las calderas más antiguas. Su principal ventaja es su capacidad para calentar una casa rápidamente, pero la desventaja es que consumen mucha energía. Su ETAS es del 75%.
La caldera de gas clásica se puede colocar en una chimenea colectiva.
La caldera de baja temperatura
Calienta el agua a una temperatura más baja (50°). Por lo tanto, la temperatura de los humos emitidos por el dispositivo también es más baja. Este proceso permite obtener un mejor rendimiento, consumir menos gas, conservando una calidad de calefacción equivalente. Los ahorros realizados se estiman en torno al 10-15% de media. En términos de funcionamiento para el usuario, no hay cambios. La eficiencia energética estacional de las calderas de BT es, de media, del 75 al 80 %.
La caldera de baja temperatura ya se puede instalar en Conductos VMC. También es adaptable a conductos de humos pero en este caso es obligatorio el revestimiento del conducto de humos. De hecho, al trabajar a una temperatura más baja, se formará condensación en este último.
La caldera de gas especial lleva derivación
Para dar respuesta a los problemas relacionados con los conductos colectivos (cuando no es posible volver a entubar un conducto), los fabricantes ofrecen ahora referencias de calderas especialmente adaptadas a los conductos de tipo shunt (humos de mampostería).