La calefacción por suelo radiante es un sistema de calefacción por suelo radiante cada vez más popular. Es práctico, cómodo, eficiente y económico. Sin embargo, es más fácil instalarlo en una casa nueva que durante una renovación. De hecho, la calefacción por suelo radiante no se puede instalar en todos los tipos de suelo, por lo que a veces implica un trabajo importante cuando se debe renovar todo.
El suelo radiante refrescante también atrae a más y más propietarios. Combina todas las ventajas del sistema clásico y además permite enfriar las habitaciones entre 2 y 3°C en verano. Funciona con bomba de calor aire/agua reversible. Vamos a explicar con más precisión cómo funciona.
Cómo funciona el piso de enfriamiento
Está conectado a su calentador. Consiste en una red de tubos colocados en el suelo y circulando agua. En verano, el agua que circula por la red es fresca. Es este proceso el que permite obtener un descenso de la temperatura de algunos grados.
El suelo radiante es menos eficiente que el aire acondicionado pero ofrece importantes ventajas. No produce ruido, no proyecta polvo, no ocupa espacio y además consume menos energía.
La instalación de un suelo radiante reversible.
Este sistema es compatible con la RT 2012.
Para instalar este tipo de transmisor, primero debe elegir el revestimiento de suelo adecuado. Deben evitarse todos los materiales porosos: la moqueta, el corcho y los suelos de roble macizo no son adecuados. Los revestimientos más adecuados son las baldosas cerámicas, losas de piedra caliza y elementos de granito.
La instalación debe respetar las limitaciones técnicas del CSTB (Centro Científico y Técnico de la Edificación).
Consulta las prescripciones técnicas del suelo reversible
La refrigeración por suelo radiante puede durar muchos años si la instalación hidráulica se controla y mantiene adecuadamente. Los filtros y las ollas de lodo deben limpiarse anualmente.